¿Cuándo salen los dientes?

Existe una gran variabilidad en los tiempos en que le saldrán los dientes a los bebés. A algunos bebés les pueden salir los dientes muy rápido, sin embargo, otros se pueden tardar. Por lo general, el primer diente sale entre los 6-9 meses de edad. Puede haber niños que al año todavía no les haya salido ningún diente, sin que esto se considere anormal.

Una forma severa de caries que presentan los infantes y niños pequeños, es aquella causada por el uso frecuente del biberón. La exposición contínua y frecuente a leche (incluyendo la leche materna), jugos u otros líquidos endulzados incluyendo el té, ocasiona un deterioro rápido y severo de los dientes del bebé o niños pequeños. Los azúcares en estos líquidos son usados como fuente de energía por las bacterias que se encuentran en la placa bacteriana. Las bacterias a su vez, producen ácidos que atacan el esmalte de los dientes. Cada vez que su hijo/a toma un líquido que contiene azúcares, los ácidos atacan sus dientes por lo menos durante 20 minutos. Después de varios de esos ataques, puede que aparezca la caries dental. Todos los tipos de azúcares, incluyendo aquellos encontrados en la leche, fórmula, jugos de fruta y líquidos azucarados, pueden causar que las bacterias de la placa bacteriana produzcan ácidos. Sin embargo, no es sólo lo que usted pone en el biberón de su bebé lo que causa la Caries de biberón, sino cuán a menudo y por cuánto tiempo los dientes del niño están expuestos a ácidos causantes de deterioro. Es por eso que ofrecerle a su niño un biberón que contenga esos líquidos varias veces al día como calmante, no es una buena idea. Por lo tanto no permita que su niño se duerma con un biberón durante la siesta o de noche, puede causar gran daño a los dientes del niño. Durante el sueño, el flujo de saliva disminuye, permitiendo que los líquidos del biberón se acumulen alrededor de los dientes del niño por largos periodos de tiempo.

Algunas veces, los padres no se dan cuenta que los dientes de un bebé son susceptibles al deterioro tan pronto como aparecen en la boca. Cuando se nota el deterioro, puede que sea muy tarde para salvar los dientes del niño.

Usted puede evitar que suceda esto a los dientes de su niño aprendiendo cómo protegerlos.

  • Después de cada comida limpie las encías del niño con un dedal  o una gasa para quitar la placa bacteriana y los restos de leche y/o alimentos de la cavidad bucal.. Cuando los primeros dientes de leche hayan erupcionado, vamos a comenzar a utilizar el primer cepillo dental con pasta dental con flúor  dos veces al día siguiendo las recomendaciones de la Asociación Americana de Odontopediatría sobre las cantidades de pasta dental con flúor que se debe de utilizar al momento del cepillado dental. La cantidad de Pasta dental siempre debe de ser colocado por los padres o una persona responsable ya que el flúor en grandes cantidades pudiera causar un defecto en los dientes permanentes de sus niños llamado FLUOROSIS.
  • Para niños de 0-2 años se debe de utilizar el equivalente a medio grano de arroz crudo dos veces al día.
  • Para niños de 2-4 años se debe de utilizar el equivalente a 1 grano de arroz crudo dos veces al día.
  • Para niños mayores de 4 años se debe de utilizar el equivalente a 1 guisante sobre

El uso de BOBOS es un tema tan controversial como hablar de política o religión. Existen autores que basados en estudios científicos, promueven y recomiendan su uso, así como otros que lo rechazan e inclusive lo satanizan. Trataré de dar mis recomendaciones basadas en mi experiencia.

Por lo que concierne al uso del chupón en relación a los problemas que pudiera ocasionar en la boca, llegamos a la siguientes conclusiones

  1. Es preferible el uso del BOBO a chuparse el dedo.
  2. Los niños que utilizan BOBO, rara vez adquieren el hábito de chuparse el dedo.
  3. Los BOBOS pueden causar deformación en los dientes y boca de los niños. Generalmente, esta deformación es mucho menor que la ocurrida por
  4. chuparse el dedo.
  5. Recomiendo el uso del BOBO por periodos no prolongados de tiempo, así como eliminarlo cuando el niño cumpla los dos años de edad como máximo.
  6. Existen BOBOS de ciertas marcas comerciales (Nuk, Gerber), de los llamados ortodóncicos, que son mejores que otros, ya que tienden a deformar mucho menos la cavidad oral.
  7. Por lo mencionado anteriormente, nos queda muy claro que el uso del BOBO es preferible al hábito de chuparse el dedo. Es importante mencionar que el BOBO nunca deberá de sumergirse o embeberse en miel , ya que esto puede ser motivo de ocasionar lesiones cariosas en los dientes del bebé o niño pequeño, similares a las ocasionadas cuando dormimos a un bebé con una biberón con leche o jugos durante la noche.

En la literatura médica concerniente a los BOBO puedo mencionar las siguientes conclusiones

  1. Si la mamá piensa en amamantar al bebé, entonces es recomendable NO DARLE BOBO. Algunos estudios demostraron que los bebés que usan BOBO y también fueron amamantados tuvieron periodos más cortos de amamantamiento.
  2. Algunos estudios demostraron la relación que existe entre los BOBOS y los episodios de otitis media aguda (infección de oídos). Mi recomendación es que si tu bebé presenta episodios frecuentes de otitis media aguda, le suspendas el uso del BOBO.

Recomendaciones generales

  1. Compra un BOBO de marca comercial reconocida (Nuk, Gerber), ya que su diseño, material y construcción, se ajustan a las normas más estrictas que requiere la United States Consumer Product Safety Commission (USCPSC).
  2. Nunca amarres el BOBO con un cordón al cuello del niño, ya que se han reportado innumerables casos de estrangulamiento.
  3. Se deben de tener varios juegos de BOBOS para poderlos limpiar adecuadamente durante el día.
  4. Limita el uso del BOBO en los periodos en los que tu bebé realmente lo necesite. No lo uses indiscriminadamente.
  5. Nunca mojes el BOBO en miel u otro líquido azucarado.
  6. Todo niño debe cesar el hábito del BOBO o del dedo alrededor de los 18 meses, como máximo en su segundo cumpleaños, para lograr así reducir el riesgos de las malas mordidas, (maloclusiones), las cuales pueden persistir hasta la dentición permanente.

Todo niño mayor de 3 años que persista con un hábito oral y todo niño que presente una maloclusión dentaria (mala mordida) temprana, debe ser referido a un odontopediatra o a un ortodoncista para ofrecer a la familia la información necesaria acerca de las consecuencias del hábito y para determinar la necesidad de tratamiento a seguir, con el fin de evitar maloclusiones esqueléticas mayores.